Si sois observadores, os habréis fijado que el pelo del cocker tiene un aspecto muy diferente entre unos y otros. Hay algunos que tienen el pelo como rizo y super alborotado, espeso..aspero y lanoso. Sin embargo hay otros que tienen el lomo superlisisto. A estos perros parece que el pelo del lomo no les crece, se mantiene siempre más o menos en el mismo largo, y además es un pelo mucho más brillante y suave. Una vez que se han visto un par de estos perros de lomo lisito, es fácil distinguirlos aún sin ser un especialista.
¿Cómo puede que ser que un perro al que nunca se le cortó el pelo, lo tenga más corto que otro rapado hace un mes?
La diferencia está en el tipo de arreglo. El primer perro es un perro cortado con máquina (no influye el tamaño de la cuchilla que se use) y el segundo es un perro al que desde cachorro se le hace trimming.
El trimming es una técnica de peluquería que os explicaré a fondo en otra entrada, pero se basa en quitar con unas cuchillas especiales (cuchillas de stripping) la pelusa que les sale cuando son cachorros. Poco a poco esa pelusa va desapareciendo para dejar paso a un pelo adulto, maduro, liso, brillante y ..precioso!
La diferencia del aspecto es porque el trimming conserva un pelo entero, sin romper, digamos que es un corte "conservador" que potencia las cualidades del pelo. La máquina y sus cuchillas en cambio, debilitan la estructura capilar, el pelo queda como segado, y provoca que el pelo vaya creciendo con un aspecto, no necesariamente peor, pero desde luego, diferente.
Si tienes un cachorro, sea de la raza que sea, vete a varias peluquerías, presta atención a la información que te dan acerca de la peluquería y los cuidados, rechaza aquella que te ofrezca sólo un tipo de corte (siempre hay varias opciones), pide imágenes para tener claro a que te quieres aproximar y después decide. Hay técnicas que son incompatibles, por eso es muy importante un buen asesoramiento desde el principio.
Y ya sabéis, para cualquier duda: tu peluquería canina de confianza!!